València fue la primera ciudad del Estado en construir un carril bici, en 1985. Las estadísticas indican que el uso de la bicicleta ha aumentado considerablemente en los últimos años en la ciudad, en paralelo a la construcción de nuevas vías. No obstante, la cifra de trayectos se sitúa alrededor del 5% del total y, dado el tamaño y la morfología de la capital del Túria, así como su orografía plana y buen clima, el margen de mejora es muy amplio.

Los trazados de la red de carriles bici de València, construidos a lo largo de décadas y partiendo de visiones y tendencias diversas, no siempre se presentan de forma eficiente. Este estudio ha focalizado tres posibles mejoras: la seguridad, la localización del usuario en cualquier punto de la ruta y la señalización clara de los posibles destinos.

Para dar respuesta a esa serie de problemas, Ciclo propone un sistema de señalética más eficiente, claro y funcional creando una serie de siete rutas a partir de la red de carriles ya existente. Ciclo toma como referencia la señalética y conceptos de otros servicios de transporte público urbano, como el metro o el autobús, para crear vías cerradas, identificadas y codificadas cromáticamente, y transbordables entre sí.

Ciclo prioriza la seguridad de las personas usuarias, tiene en cuenta el diseño local y las necesidades de la población, fomentando el uso de una alternativa eficiente y segura a la red de transporte público urbano.

Al promover el uso de la red ciclista valenciana, Ciclo pretende concienciar sobre el medio ambiente y proponer soluciones de diseño que faciliten un modo de vida sostenible.

Puedes descargar el PDF del mapa de Ciclo aquí:

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